Por: Fernanda Huerta.
Ubicado a quince minutos de la capital del estado, Pachuca de Soto, Mineral del monte o Real del monte es el Pueblo Mágico más alto del país, forma parte de la ruta Corredor de la Montaña que agrupa a poblaciones como Huasca de Ocampo, Mineral del Chico, Omitlán o Atotonilco.
Con atractivos como la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, o el museo del paste en donde podrás elaborar tu propio paste y demostraras tus dotes culinarios Real del monte es el lugar perfecto para los amantes del frio que buscan disfrutar de una tarde tranquila en este pequeño pero hermoso lugar.
El pueblo mágico ofrece más que pastes y recorridos a minas, en su interior se localiza el hospital civil del lugar, el cual fue convertido en un museo y para los aficionados del terror es una atracción perfecta, ya que al ingresar estarás acompañado por el guía que irá contando una serie de leyendas sobre entidades encerradas en el recinto.
Pero si te gusta un poco más el misterio un tour por el panteón inglés será lo más adecuado para ti, en este hermoso pero tétrico lugar tendrás un recorrido bastante peculiar y sobrio en donde te contarán las leyendas sobre los difuntos que habitan ese panteón, por suerte para día de muertos las instalaciones se encuentran abiertas.
Ver esta publicación en Instagram
Una publicación compartida de Carlos Alejandro (@carlosalejandroc_)
En dichas fechas se realizan recorridos con las leyendas que son representadas por actores del Instituto de Artes de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, en donde jóvenes caracterizados montan escenas sobre la leyenda que es contada, a su vez afuera de este instituto se realizan pequeños eventos para atraer al público.
Ver esta publicación en Instagram
Una publicación compartida de Las Flores Residencial (@residencial_lasflores)
Y como todos los pueblitos en México, este lugar tiene su propia feria, en donde le festejan al santo patrono, bajo el nombre de “Señor de Zelontla” se festeja en su nombre, las calles son adornadas con puestos coloridos que venden todo tipo de cosas, desde peluches hasta las quesadillas y pastes más ricos de la región, así que no temas al frio y atrévete a disfrutar de este pueblito mágico en un recorrido por Hidalgo.